Dinero en el banco

Cómo saber cuando la refinanciación tiene sentido

Refinanciar un préstamo es un paso importante que puede resultar en ahorros significativos. Pero la estrategia también puede resultar contraproducente, ya que lo deja en una situación peor de la que tenía antes, y con menos dinero en el banco. Entonces, ¿cómo sabe si debe refinanciar? La respuesta corta es que debes hacerlo si vas a terminar ahorrando dinero y si no te va a causar ningún problema nuevo.

Refinanciamiento para ahorrar dinero

¿Por qué querrías refinanciar? Usted puede potencialmente ahorrar mucho dinero, y esa es generalmente la mejor razón para refinanciar.
En particular, la refinanciación puede permitirle gastar menos en intereses durante la vida de su préstamo. Hay varias maneras de reducir los costos por intereses:

• Refinanciar a una tasa de interés más baja para que usted pague menos sobre el saldo de su préstamo.
• Cambie a un plazo de préstamo más corto, incluso si esto significa pagos mensuales más altos, de modo que pague intereses por menos años.
• Consolidar las deudas con tasas de interés altas en deudas con tasas de interés más bajas.

Afortunadamente, hay una manera de determinar si usted ahorrará dinero: Comprueba los números. No es especialmente difícil calcular el ahorro potencial de la refinanciación. Sin embargo, mientras que reducir sus costos totales de intereses de por vida es sabio, refinanciar con esa meta no siempre es la opción correcta.
Cambiando la deuda. La tercera estrategia antes mencionada -consolidar una deuda con altas tasas de interés- es un tanto cuestionable. Si refinancia deudas no garantizadas con un préstamo garantizado, está asumiendo riesgos adicionales. Por ejemplo, puede usar un préstamo sobre el valor acumulado de la vivienda para pagar las deudas de las tarjetas de crédito. Sí, usted pagará la deuda con una tasa de interés más baja, pero también ha puesto su casa en riesgo. Si usted no paga la deuda de su tarjeta de crédito, es poco probable que la compañía de la tarjeta de crédito pueda ejecutar la hipoteca de su casa. Pero una vez que usted promete su casa como garantía usando un préstamo hipotecario, su casa es un juego justo.
Pagos más bajos. Un pago más bajo se utiliza a menudo como justificación para la refinanciación. Si bien puede ser agradable pagar menos cada mes, asegúrese de mirar el panorama general. Extender un préstamo (comenzar un nuevo préstamo a 30 años cuando sólo le quedan 15 años, por ejemplo) puede aumentar la cantidad total de intereses que paga durante su vida. Para entender por qué, utilice una tabla de amortización que muestre cuánto interés paga con cada pago mensual. En un préstamo a largo plazo totalmente nuevo, los pagos en los primeros años sólo hacen una pequeña mella en el saldo de su préstamo.
Cambiar a una hipoteca de tasa ajustable (ARM) es otra manera de reducir su pago. Sin embargo, las tasas de interés de estos préstamos pueden aumentar, y su pago puede algún día subir a un nivel que no es asequible. Usted debe refinanciar en un ARM sólo si está dispuesto y es capaz de tomar el riesgo de pagos mensuales más altos en el futuro.

Otras razones para refinanciar

Usted ya sabe que debe refinanciar cuando pueda ahorrar dinero, pero ¿qué pasa con otras estrategias?
Reducir el riesgo. Refinanciar puede ser una buena idea incluso si usted no obtiene una tasa de interés más baja o un préstamo a corto plazo en algunos casos. Por ejemplo, puede refinanciar para salir de un ARM. Si le preocupan los aumentos significativos de la tasa de interés en el futuro, refinanciar en una hipoteca con tasa de interés fija le dará más certeza, aunque los pagos mensuales actuales (y la tasa de interés) sean más altos. Evalúe las tasas actuales de las hipotecas de tasa fija, sus expectativas de cambios en las tasas y la posibilidad de que cambie su ARM actual.
Desintoxicación de deudas. También puede sacar dinero en efectivo para consolidar deudas con tasas de interés altas, pero recuerde que puede terminar asumiendo más riesgos de los que tenía antes. Dicho esto, si usted tiene un plan sólido para eliminar las deudas tóxicas, la estrategia podría funcionar. Si el plan falla, usted puede enfrentar el riesgo de perder su casa en una ejecución hipotecaria o de que su vehículo sea embargado.
Invertir en su futuro. Algunos propietarios de viviendas utilizan el refinanciamiento con dinero en efectivo para pagar la educación, las mejoras de la vivienda o para iniciar un negocio. Aunque esos usos son mejores que pagar por vacaciones costosas o consumo continuo, la estrategia puede ponerlo en una posición peor que la que tenía originalmente.

Qué hay que tener en cuenta

Si está pensando que es hora de refinanciar, investigue lo siguiente:

• El valor líquido de la vivienda puede cambiar. Si retira dinero en efectivo o añade costos de cierre significativos al saldo de su préstamo, reducirá su participación en el capital de su propiedad. Sin embargo, si simplemente reemplaza un préstamo por otro del mismo tamaño, su capital sigue siendo el mismo.

Antes de refinanciar, haga un análisis básico del punto de equilibrio. Probablemente tendrá que pagar los costos de cierre, por lo que necesita averiguar con precisión cómo y cuándo recuperará esos costos y cómo afectarán sus finanzas en el futuro. Recuerde que si no paga ningún costo de cierre, terminará con una tasa de interés más alta.

En lugar de refinanciar

A veces la refinanciación no es su mejor opción, o simplemente no es factible.
Usted todavía puede obtener algunos de los beneficios de un refinanciamiento sin tener que pasar por el proceso. Por ejemplo, si desea ahorrar en costos de intereses, puede pagar más del mínimo requerido cada mes. Se deshará de la deuda antes y gastará menos en intereses a lo largo de su vida.